Conil, Zahara de los Atunes, Barbate y Tarifa palpitan al unísono cada año cuando uno de los reyes del mar, el atún rojo, acude puntual a su cita. Seguiremos su rastro durante un fin de semana mientras disfrutamos de playas salvajes, espacios naturales, sitios arqueológicos, clima benigno y una mesa privilegiada.