LA RIOJA. Haro, Luces de la Modernidad

La nueva edición de la muestra La Rioja Tierra Abierta comenzó el pasado 22 de marzo y estará presente hasta el 13 de octubre de 2013 en Haro. Su eje central es el esplendor industrial y la apuesta por la modernidad de esta ciudad desde finales del siglo XVIII hasta el siglo XIX.

Revista Viajeros (edición 168)

Luces de la Modernidad

La exposición se celebra bajo el título Haro: Luces de la Modernidad y ensalza el período de mayor pujanza económica, cultural y social de la localidad y la apuesta histórica de Haro por subirse al tren de la innovación y el progreso. En concreto, gira en torno a la Ilustración –con su fe en el progreso y la apuesta ciega por la razón– y la posterior Revolución Industrial. Dos épocas que marcaron su destino. En la misma, junto a nombres de relevancia internacional –como Byron, Kant, Edison, Pasteur o Darwin– brillan también personalidades riojanas como los científicos Hermanos D’lhúyar, el Doctor Zubía, Rey Pastor o Lucrecia Arana de Haro, y el pintor Enrique Cid-Paternina (1866-1913), cuya obra nunca ha sido expuesta dado que pertenece a la Fundación Privada Hogar Madre de Dios.

Esta gran muestra se divide en varias sedes: el Palacio de Bendaña, el Museo del Torreón, el Barrio de la Estación y la Estación Enológica.

Palacio de Bendaña. Recepción y exposición central

La privilegiada sede central se halla en el Palacio de Bendaña, un edificio que desde el siglo XV se apoya en la antigua muralla de la ciudad. Refugio de la realeza en tiempos de guerra y de abanderados de la razón en épocas de paz, muestra cómo sus moradores pasan de blandir un sable a esgrimir la pluma del progreso, y cómo con el trazo de un pincel atraparon la luz para difundir el ambiente de la vida en la modernidad.

La exposición recorre la historia del siglo de las Luces y la Modernidad (XVIII-XIX) e ilustra cómo la sociedad en general y una ciudad en particular, respondieron a los retos de una brusca revolución política, social y económica que obligó a llevar a cabo una profunda transformación del orden y de las prácticas tradicionales. La respuesta de Haro a ese reto fue generar un floreciente desarrollo industrial, que no sólo trajo la luz eléctrica, el ferrocarril o el Banco de España a la ciudad, sino que transformó la industria del vino y dio pie a la creación de una serie de bodegas hoy centenarias.

Museo El Torreón. Exposición Legado Paternina

El edificio que actualmente acoge el Museo El Torreón es el único resto existente de las murallas que desde el siglo XII defendían la ciudad de Haro. Forma un conjunto gótico-plateresco, con un torreón gótico del siglo XIV y una portada plateresca del palacio del siglo XVI.
Este espacio cuenta con una colección permanente de Arte Contemporáneo con obras de autores riojanos.

Durante la celebración de "Haro, Luces de la Modernidad" alberga una exhibición del pintor harense Enrique Paternina García-Cid (Haro, 1866-1917), que da a conocer su personalidad, su universo creativo y su colección, así como las excelentes relaciones que mantuvo con los pintores de la época (Zuloaga, Amarica, Regoyos…), destacando la influencia e inspiración de su obra en otros, como es el caso del joven Pablo Ruiz Picasso.

Estación Enológica. Trasluces. Camino de la imagen

La pujanza de la economía de Haro en el último tercio del siglo XIX y comienzos del XX, asentada sobre la producción de vino, precisó de un espacio como la Estación Enológica que diera respuesta a los retos de la viticultura moderna.  Testigo del progreso emprendedor de la localidad y en contacto con la tierra y con el mundo, la vida local quedó plasmada e interpretada fehacientemente gracias a la fotografía. Por primera vez sus habitantes se encontraban más allá de lo inmediato; por primera vez tuvieron conciencia veraz de realidades ajenas y pudieron transmitir sensaciones y valores de personas, de paisajes, de productos…

La exposición de este espacio muestra cómo los tiempos modernos comenzaron a captar la luz y a atrapar el tiempo para compartir un mismo conocimiento de la realidad y para construir visualmente una memoria colectiva.

Barrio de la Estación. Bodegas Centenarias

Este emblemático lugar de la ciudad de Haro, microcosmos que presenta la mayor concentración de bodegas centenarias del mundo, inició su historia en la segunda mitad del siglo XIX como consecuencia de la sustitución de las caballerías como medio de transporte tradicional del vino por un novedoso ferrocarril y sus “caminos de hierro”.

Como espacio histórico las bodegas del Barrio de la Estación abre sus puertas para que el visitante pueda conocer sus viñedos, la historia y los secretos de las grandes familias vinícolas y disfrutar, además, de una cata de vino en sus instalaciones.


Más información

www.lariojatierrabierta.com