LA PATAGONIA DESCONOCIDA. Libro gratuito
La Patagonia desconocida es un libro que distribuye gratuitamente la fotógrafa americana Linde Waidhofer para manifestar su rechazo hacia el proyecto aprobado por el gobierno chileno relativo a la transnacional Hidroaysén (uno de los grandes planes hidroeléctricos que se llevan a cabo invadiendo la naturaleza, según algunas organizaciones). Con este gesto pretende manifestar su repulsa ante los hechos que están sucediendo en Chile.
Sin querer entrar en los pormenores de esta situación, que sólo conocemos a través de lo publicado en medios de comunicación, lo que sí os recomendamos es descargar el libro fotográfico (adjunto en formato pdf) y disfrutar de unas maravilosas imágenes de la Patagonia Chilena.
Os dejamos los primeros párrafos del libro:
"En Sudamérica , la palabra “sur” es más que una dirección, más que una descripción, mucho más que un adjetivo. El sur, el lejano sur, el sur extremo y distante es un imán y una idea, un mito y un misterio, una expresión de lo inexpresable, un indicio, una sugerencia. A veces es un lugar solo en nuestra imaginación, otra veces apenas una vaga noción romántica.
Sin embargo, en algunas ocasiones, luego de un largo viaje, de un peregrinar por un gran paisaje, a veces después de cruzar un paso para descubrir a lo lejos un valle escondido, o mirar cómo desaparece un río turquesa tras un barranco inexplorado, o presenciar atónito cómo los vientos antárticos dejan al descubierto de golpe, una cordillera entera, a veces, en esos momentos especiales, el sur se convierte en un lugar muy real, y deja de ser una fantasía.
El sur es un lugar real. Su otro nombre es Patagonia. Su nombre secreto no se deletrea, pero se revela en una rica colección de fiordos y bosques, ventisqueros y lagos glaciales, vientos que pulen los cielos y barren las pampas, un espacio casi salvaje habitado por pocas personas y muchas sorpresas.
Este es el sur, este es la Patagonia de la cual Linde Waidhofer y yo nos enamoramos en nuestro primer viaje al sur de Chile en el 2002. Y no es exageración. Después de un mes viajando por la Patagonia central chilena, por la región de Aysén, nos fuimos, prometiendo volver lo antes posible, preguntándonos a nosotros mismos por qué nos íbamos, dejando atrás el paisaje más bello que nunca habíamos visto, después de un otoño espectacular de gran colorido, dejando atrás nuevos lugares y nuevos amigos. Ha sido fácil volver cada año y cada vez por más tiempo; ha sido fácil pensar que la Patagonia es nuestro segundo hogar y fácil también compartir nuestra pasión y celebrar uno de los últimos lugares perfectos de nuestro planeta"